sábado, 11 de octubre de 2008

Los leones son míos







¿Qué pasa en la casa?
¿Dónde están los leones?
La casa fue rondada por los leones.
Nunca se fíen de los leones,
de sus apariciones misteriosas y fantasmagóricas,
de su apariencia pacifica.
Sucios en su alma, pero de cuerpos dorados.
¿Qué es ese silencio exterior? ¿Fatídico anuncio?
-¡Atrápenlos!
Imposible.
Sin aviso y a destruir.
Era su consigna. Atacar. Romper todo a su paso.
Lastimar, casi hasta la sangre.
La noche era su capa invisible. La casa en ruinas, su visibilidad.
La inválida abuela solo atino a taparse la cara.
Del resto de su cuerpo no quedaba nada desde hacia años.
No disimulaba su aullido espiritual.
Mirábamos petrificados la masacre. No pudimos (¿podíamos?) hacer nada.
Nunca habíamos visto una pira de este tipo.
Su alma se elevo entre las fauces.Tras el festín, salieron en busca de otras casas con abuelas

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